Tren turístico, animales, parque infantil, zonas verdes, playas, Mar Cantábrico… ¡Y hasta un palacio real!
Encontramos en plena zona urbanita de Santander este precioso espacio donde poder pasear, ver animales y el Palacio de la Magdalena. Su entrada es gratuita y el horario de 8 a 22.
Según entras al parque por terreno asfaltado, se abre ante el visitante un enorme jardín verde, prados y setos bien cuidados nos dan la bienvenida, mientras altivos árboles se van elevando sobre una misteriosa colina.
Para poder ver cómodamente todo el recinto tienes la opción de montarte en el típico tren turístico por el módico precio de 2€. El recorrido tiene una duración aproximada de 15-20 minutos, amenizado con un mensaje grabado, que a modo de audio guía va contando la historia del parque y otras curiosidades sobre la ciudad de Santander, en especial las relacionadas con su conocido palacio.
El parque alberga en su interior el Parque Marino de La Magdalena, un “mini-zoo” con diferentes tipos de animales, ese gran y sencillo reclamo que tanta admiración causa en los más peques de la casa. Además de animales más “típicos” como patos, gansos y demás primos-hermanos de la familia, los niños podrán ver animales marinos: pingüinos, focas y leones marinos, es muy interesante acudir a estos recintos en los horarios en los que les dan de comer.
Después de ver el parque y la zona de los animales es imprescindible acercarse al Palacio, lleno de detalles que llaman la atención del visitante. Son los fundamentos del eclecticismo los que rigen el estilo arquitectónico de esta construcción, obra de Marcos Lavín y Gonzalo Bringas. Además de lo bonito de la construcción en sí, cabe resaltar que las vistas desde allí son impresionantes.
Para finalizar la visita, sobre todo si se acude con niños, nos encontramos con el enorme parque infantil del recinto, perfecto para que jueguen.
En definitiva, una visita que no puede faltar en sus vacaciones en Cantabria.
Disenium
