Liébana es una comarca bastante aislada del resto de Cantabria, está enclavada en los Picos de Europa y su orografía, a modo de gran hoya, entre murallones de piedra caliza, han hecho de ella la mejor definida de Cantabria. Entre las cosas que podemos hacer destacan:
- Atravesar el Desfiladero de la Hermida, sus 21 kilómetros de longitud lo convierten en el más largo de la Península Ibérica y es el que marca el límite de los Picos de Europa y nos da acceso al Valle de Liébana. En el pueblo de La Hermida encontramos las aguas termales naturales que nacen en la orilla del río Deva.
- Pasear por el suelo empedrado de Potes, en su casco antiguo todavía se conserva este tipo de suelo.
- Subir al teleférico de Fuente Dé y maravillarte con las vistas; el teleférico une la localidad de Fuente Dé con el Mirador del Cable, salvando un desnivel de 753 metros y situando a quién lo sube a 1.823 metros de altitud en unos asombrosos 4 minutos. Las vistas son espectaculares.
- Visitar Santo Toribio, famoso monasterio franciscano que alberga obras del Beato de Liébana así como el Lignum Crucis , el trozo más grande conocido de la cruz donde murió Jesucristo.
- Comer un cocido lebaniego, cuya principal diferencia con respecto a otros tipos de cocido es el garbanzo que se utiliza en su elaboración, uno mucho más pequeño.
- Visitar una destilería y ver cómo se elabora el Orujo que es uno de los productos cántabros que gozan con mayor reconocimiento dentro y fuera de Cantabria.
- Probar el mítico pan artesano en Panadería Ángel, está ubicada en el Barrio del Sol y es una referencia tanto en Liébana como en el resto de Cantabria.